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miércoles, 16 de febrero de 2011

Primeros pasos de un emprendimiento

Un emprendedor, tiene que saber que tener la idea es solo el primer paso para convertirla en un emprendimiento, en un negocio.
Una vez que ya te decidiste a empezar el siguiente paso es seguir un camino metódico para llegar a convertirla en una empresa.



1- Elige una idea y enfócate!!

Frecuentemente, el emprendedor detecta al mismo tiempo más de una oportunidad que promete convertirse en un negocio rentable, pero tus energías deben enfocarse en un proyecto a la vez para procurar un exitoso proceso.


2- Busca Alguien en quién Apoyarte

Alguien de tu confianza y con mayor experiencia que la que tú tienes. Apóyate en él para discutir sobre el negocio. Busca mentores.

3- Define Bien la idea, ponte objetivos claros, medibles y no olvides establecer una fecha tope.

Hay una frase que dice: Inventa un sueño, ponle fecha y ya no es un sueño, es un objetivo

4- Hazte Muchas Preguntas!.

Hazte muchas preguntas e intenta responderlas.
¿Qué información necesitas sobre el negocio?
Ya sea información legal o administrativa, hazte preguntas!!.
Comienza por ¿Qué necesidades satisface? ¿Cómo? ¿Para quién?
Trata de detectar que cosas pueden hacer trastabillar o hasta fracasar el proyecto. De esta manera, podrás detectarlo a tiempo y solucionarlo, antes de empezar.

5- Pasar todo al papel

Si ya decidiste el negocio que vas a emprender, ahora deberás poner todo en un papel pues, cualquier actividad que se inicia sin la preparación adecuada puede convertirse en un fracaso.
Por lo general los emprendedores ansiosos por empezar un negocio tienden a pasar por alto la etapa de planeación sobre papel.
Por eso arma un Cronograma, con los objetivos, tareas, fechas, responsables.

6- Conseguir Recursos Necesarios


Una vez que programaste las actividades que realizará tu empresa, podrás darte cuenta de la forma en la que deberás utilizar los recursos. Toca el turno de hacer un análisis de las posibles fuentes de financiamiento para llevar a cabo la implantación del emprendimiento.
Más allá de cómo empieces tu negocio, a lo grande o en pequeño, lo importante es que se tengan los recursos financieros suficientes para el arranque, los primeros meses de operación y los imprevistos.

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